Luis Hernández
Fuiste esa lluvia repentina de verano que no vino para quedarse
fuiste el laberinto donde muchas veces me encontrabas, otras, me perdías completamente.
fuiste el último intento tormentoso por no querer despertar de un sueño
fuiste el adiós que pide a gritos un regresa
fuiste momentos felices transformados en nostalgia
fuiste el silencio acumulado de un amor atado por el miedo
fuiste los gritos al borde del abismo de una esperanza
fuiste la despedida insegura de alguien que no quería soltarte
fuiste los pretextos de un equivocado en momentos de apuros
fuiste el momento exacto convertido en un momento incomodo
fuiste el amargo dulce, el blanco negro, algo como feliz triste
fuiste él ¡te amo! que pudo salvar el mundo de un enamorado
fuiste la historia borrada, echada al olvido.
De hecho fuiste más.
fuiste la noche fría y el día soleado de mi rutina
fuiste el a donde vamos de mis domingos simples
fuiste la sonrisa oportuna de una tarde amarga
fuiste el aliento en los días de resaca
fuiste el regalo más grande ese que aún conservo
fuiste el beso mal dado ese que dio tranquilidad a un desesperado
fuiste el detalle que llego en un momento de ira
fuiste la calma de un tímido en la multitud
fuiste la ansiedad de mi necesidad convertida en felicidad
fuiste ese minuto donde un corazón vacío quiso detenerse.
Fuiste y siempre serás lo que fuiste
el amor de mi vida.
Eres Realmente Increíble,Con un alma maravillosa...amo tu forma de escribir y tu forma de pensar...Eres realmente Increíble, tu poesía llega hasta mi alma!!Ojala pudiese Conocerte algún día y tu forma tan especial de escribir!!!
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